domingo, 17 de abril de 2011

RECICLAJE MUNDIAL II (por Juan Marcos)


SOBRE EL POLICENTRISMO DE LAS NUEVAS RELACIONES DE FUERZA:
El renacimiento exponencial de Asia y el sorpresivo y novedoso desarrollo de algunas regiones (America latina y el sur de África por ejemplo) constituyen mutaciones inéditas en la historia de las relaciones de fuerza internacional. Cambios de esta envergadura solo son comparables con la metamorfosis sufrida por el planeta tras la revolución industrial. Estamos en presencia de un fenómeno de emergencia potencial de la denominada “periferia capitalista”.
Los centros de influencia tradicionales (Europa y EU a la cabeza) están perdiendo su poder de atracción y los “márgenes del mundo” se erigen en proto-unidades culturales que desafían la hegemonía cultural impuesta por más de 3 siglos. Esta tendencia hacia un mundo policéntrico sigue un camino constante que provocará transformaciones estructurales en las relaciones diplomáticas.
Dejando de lado las particularidades, y entendiendo que no pueden ser homologadas las diferentes trayectorias históricas de independización sin caer en reduccionismos, hay que decir que esta “evolución” es particularmente evidente en China e India. Estos países - que juntos albergan a casi a la mitad de la población mundial-, han visto multiplicar su producto bruto interno (PBI) y por consiguiente, sus habitante han incrementado su poder adquisitivo en el marco internacional.
Brasil (el 4to gigante) ha triplicado su PBI pasando de 3500 a 9000 dólares por habitante en los últimos 10 anos –la deuda de nuestros vecinos sigue siendo con la distribución equitativa-. Pensémoslo un poco. El mundo tal y como lo conocemos es el resultado de una visión eurocéntrica construida por las grandes potencias marítimas a partir del “descubrimiento” de América. Esto no constituye una valoración política o ideológica: el meridiano 0 no pasa ni por Shangai ni por Buenos Aires, pasa por Greenwich (Reino Unido), y eso es una demostración de cómo el mundo es erigido desde una visión centralizada.
El mapa del planeta representa el mundo de intereses económicos y de colonización cultural llevado a cabo por las potencias europeas desde el siglo XVI. Solemos olvidar que a lo largo de la historia coexistieron 2 “mundos” globalmente comparables en desarrollo cultural y tecnológico. Por un lado Occidente, que delimitaremos como la zona de intercambio atlántico-mediterránea con origen greco-latino. Por el otro Oriente, o sea, Rusia, el Imperio Otomano, Asia. En efecto, fue en el período que va desde el siglo XIX y hasta la caída del muro de Berlín que occidente amplió su dominio sobre el mundo. Hay que recordar que las jerarquías (tan naturalizadas) han sido instituidas a partir de la primera revolución industrial. La “división internacional del trabajo” era la forma elegante de nombrar ese proceso de fragmentación y divergencia que dividió el mundo entre “países desarrollados” y el “tercer mundo”.
Países como el nuestro (aunque en muchos aspectos constituye una excepción junto con Uruguay y Japón) eran integrados en la lógica económico-disciplinaria de los centros imperiales como componentes subalternos de un sistema de intercambio. La economía mundial exigía una organización coercitiva para los países periféricos, dotados de las materias primas necesarias para las nuevas metrópolis.
En la actualidad, el movimiento ascendente de la periferia es acompañado por un proceso de independización regional (el MERCOSUR es un ejemplo emblemático). El desarrollo económico de estas nuevas regiones alcanzaría el 60 % del PBI mundial para el 2020, lo que se traducirá necesariamente en una mayor autonomía política. ¿Entonces? Nos encaminamos hacia un sistema internacional descentralizado, con una multiplicidad de polos culturales y de influencia regional. Desde el punto de vista histórico, este proceso es inédito y aparece como el resultado inevitable de la profundización del modelo capitalista de desarrollo económico.
Al mismo tiempo que el capitalismo dio lugar a la primer gran divergencia internacional, es el avance de dicho modelo el que siembra los cimientos del fin de un ciclo de más de 2 siglos de preponderancia occidental. La escalada de nuevas potencias industriales pone punto final a una estructura histórica de distribución de la riqueza y de administración coercitiva y colonial de los recursos planetarios. Una nueva diplomacia se está gestando: la inoperancia de los organismos creados tras la segunda guerra mundial (ONU, OTAN, Banco Mundial, G7, etc.) exige una evolución que refleje una nueva realidad. El verdadero desafío es revisar las categorías mismas con las que nos referimos a este nuevo proceso.

¿Es indispensable hablar de “relaciones de fuerza”? ¿Tiene que haber un gerente planetario? ¿Es posible pensar en una administración mundial cooperativa? ¿Como construir consenso internacional sin atentar contra la libertad de cada pueblo de vivir según sus tradiciones? ¿Hasta donde puede ser puesta a prueba la tolerancia?

7 comentarios:

Hernán Barrios dijo...

Juan, que la correlación de fuerzas mundial cambió es indiscutible. Desde mi subjetiva cosmovisión el cambio es positivo y alentador. Desconozco fehacientemente que anda pasando en África, pero creo que los vientos en Latinoamérica están soplando quizás como nunca antes.
Ahora bien, a modo seguir abordando el fenómeno desarrollado me detengo a observar la tipologia de anticuerpos que están surgiendo como resistencia a los cambios Latinoamericanos (de todo orden emergen anticuerpos).
En Honduras el presidente elegido por sufragio popular fue destituido mediante una “novedosa” modalidad de golpe de Estado y aún no puede regresar al País.
En Haití se exilia al presidente que representaba “ideologías” alejadas de la casa blanca, hace pocos dias asume otro presidente que promete presencia militar Estadounidense en las calles.
En Perú Keiko Fujimori hija del dictador se perfila a la presidencia (es muy dificl de digerir a esta altura de las circunstancias que una candidata cuyo eje de plataforma se base en indultar al genocida del padre pueda ganar una elección).
En Colombia el hombre del ex presidente Uribe gana la eleccion holgadamente y los falsos positivos(matanza de civiles por parte del Estado) parecen ser una cuestión menor para la sociedad colombiana.
En Chile el conservador Piñera propone un nuevo indulto.
Estas particularidades que detallo no eclipsan en lo mas mínimo al proceso alentador que experimenta América Latina, pero son indicadores objetivos y observables significantes que reflejan una dominación no solo limitada a lo político sino también con un anclaje cultural que no podemos omitir a la hora de preguntarnos ¿está la matriz sociocultural latinoamericana configurada para profundizar los espectaculares cambios que se le presentan? En Fin… Que sigan las reflexiones.

Gisela dijo...

juan dejas bien clarito el nuevo orden incipiente, que es insolito si lo comparamos con las hegemonias tradicionales.pero que hacer para no desperdiciar estas condiciones?
entiendo lo que describe hernan pero creo que la mejora economica es el primer paso que va a permitir construir la matriz a la que te referis.

ezequiel dijo...

Un gerente planetario seria volver a la division del trabajo. las soberanias de los paises subdesarrollados no puede alcanzarse con acuerdos universales.

Juan dijo...

Gisela,
Me gustaria darte una respuesta, pero no la tengo. Lo que se me ocurre es que, una manera de no repetir los errores del desarrollo de un modelo de explotacion de recursos es eliminar cualquier estructura heredada de dicho modelo. En ese sentido, quiza no sea momento de "no desperdiciar". Tambien es cierto que si uno se duerme lo "acuestan", como dice el refran. Espero que de alguna manera se puedan generar nuevas formas de hacer y entender la politica, la economia, la cooperacion... Enfin. Eso tal vez si es un poco utopico
La seguimos...

Valentin dijo...

Me parece un locura creer en un nuevo capitalismo, estando de acuerdo o no con el.No es viable ningun proyecto fuera del capitalismo, Cuba? Rusia? La china dicese comunista pero es mas que estados unidos.hay que integrarse sin corrupcion a la economia mundial, eliminar clientelismos y populismos demagogos.

bufa jig dijo...

SI!miles de nuevas historias comienzan a salir a la luz, sometidas durant siglos por la historia oficial o por un meridiano que nos dice que el dia universal no comienza cuando abrimos los ojos.

julio dijo...

La matriz sociocultural latinoamericana que decis hernan tiene que buscar la civilizacion y el respeto a la democracia, de esa forma vamos a desarrollarnos, no creo que vaya por el lado autoritario de venezuela.